Se acaba de publicar un estudio externo financiado por la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA) y llevado a cabo por investigadores de la Universidad Pablo de Olavide (Sevilla) que viene a demostrar sin lugar a dudas el éxito que supondría implantar un plan duradero de asistencia personal para los habitantes de esta comunidad autónoma. Este estudio se ha venido realizando al tiempo que se ha llevado a cabo el proyecto de Vida Independiente con asistencia personal impulsado y gestionado por la Asociación Vida Independiente de Andalucía (VIAndalucía).
Bajo la metodología del retorno social de la inversión (SROI), se han medido no sólo los bienes económicos sino también los impactos sociales que tiene este servicio cuando se desarrolla debidamente. Cabe destacar que por cada 1€ de inversión, se obtienen 3,62€ de retorno. Queda claro que la asistencia personal ayuda de forma óptima a cumplir los dictados del artículo 19 de la Convención Internacional sobre los derechos de las personas con discapacidad, a llevar una forma de vida independiente y contribuye a la participación e inclusión de personas con necesidades de apoyo humano.
Los participantes en el proyecto intuían el éxito del mismo, pero resulta asombroso saber que por cada 1€ de inversión, han recibido 3,62€ de retorno económico y social los diferentes agentes implicados y a la sociedad en su conjunto. De este modo, queda demostrada la necesidad de generalizar y facilitar este recurso a las personas con características funcionales distintas a las demás y que necesitan este apoyo. Además, este servicio debe hacerse de un modo estable y permanente de tal modo que no exista la incertidumbre de retornar a una vida sin apoyos y sin posibilidad de planificación.
Las diferentes administraciones que se ven favorecidas por este apoyo lo hacen de un modo directo e indirecto. Se trata de la administración general del Estado, la andaluza y las diferentes administraciones locales o municipales. Todas ellas ven el aumento del empleo producido por la asistencia personal, con los consiguientes ingresos por impuestos y otros gastos de los trabajadores y beneficiarios, y el descenso en partidas previamente destinadas a otras prestaciones por desempleo y otros servicios.
Sin duda los principales protagonistas de estas nuevas políticas, según indica el estudio, son las personas beneficiarias que ven cumplido su Derecho a la Vida Independiente y a la inclusión en la comunidad de la que forman parte. Es importante señalar el incremento en la salud física y emocional tanto de los participantes en este proyecto como de su entorno (familias, amistades, convecinos) y, por tanto, la disminución del gasto sanitario producido por estas personas. La recuperación de los distintos ambientes familiares y el incremento en la igualdad de oportunidades en lo referente al ámbito laboral también es digno de señalar.
Sin embargo, cabe resaltar el incremento en la cohesión social provocada y los altos niveles de participación a los que lleva la libertad de elección. Es digno de señalar, como hace esta investigación, el aumento en el sentimiento de pertenencia a la sociedad y el menor desarraigo por parte de las personas discriminadas por sus rasgos funcionales. Nunca es tarde si la dicha es buena, y como dice este importante documento, se hace necesaria la universalización del servicio en Andalucía, siguiendo los parámetros indicados por el Movimiento de Vida Independiente. La asistencia personal debe ser suficiente en horas y digna para las partes implicadas a fin de que surta los efectos pretendidos.
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