Nuestro compañero César Giménez Sánchez ha realizado este informe sobre la falta de accesibilidad de las bibliotecas públicas de Málaga.
“En Málaga capital, si el hipotético lector va en silla de ruedas y tiene que ir a una de estos establecimientos, hay más de un 20% de ellas a las que ni siquiera se puede entrar. Si ya hablamos de la necesidad de ir al aseo, en la gran mayoría de estos edificios el ciudadano no puede o tiene muy difícil entrar y hacer uso de él, si es que existe.
El ejercicio que nos planteamos fue acudir a las bibliotecas municipales e ir a lo sencillo: observar y comprobar en nuestras carnes si se podía entrar (y salir) de ella, y utilizar el aseo o ver si cumplía la normativa vigente en lo referente a accesibilidad y seguridad. Sabíamos de antemano que poníamos el listón muy bajo.”