Estimado Señor Rajoy:
Se suele añadir al sustantivo “sequía”, el adjetivo “pertinaz”. Así, ya apenas se entiende la palabra sequía por sí sola, mientras pertinaz apenas se usa en otro contexto que no sea el de acompañar a la palabra sequía. Es una de las cosas que tiene el lenguaje: cambia y evoluciona en lugar de estancarse o retroceder. Pero, por ir al grano, la sequía en este caso, además de ser pertinaz, es insoportable.
Convendrá conmigo (o no) en que gran parte del Estado de bienestar ha saltado por los aires, sin embargo, todavía ingenuos como yo creemos que vivimos en un Estado de derecho. Si esto no fuera así, reinaría el caos, y eso no beneficia a nadie.