Texto de Carlos Manuel Reyna
Hoy, en Sevilla, me dispongo a participar en este quinto paseo junto a mis compañeras y compañeros de VIAndalucía. Es la primera vez que participo en esta iniciativa ciudadana. Una actividad necesaria porque nos basamos en el principio de que una calle mal diseñada, que imposibilite la convergencia de todos y todas es una limitación de nuestra libertad deambulatoria, porque nuestra condición de seres humanos diversos nos tiene que bastar para poder transitar por cualquier parte de nuestras calles.
La visibilidad o invisibilidad de la diversidad se produce porque la calle lo permite. Porque si no hay visibilidad no existe una inclusión real, si no se produce esto, no podemos formar parte de una sociedad heterogénea, sino excluyente. Por lo tanto, la calle es un elemento esencial para la visibilización que proyecta la sociedad, en nosotros y en las instituciones está si la queremos para que todos y todas coexistamos o la queramos que siga siendo excluyente. Porque es más importante el todo que las partes, porque lo exclusivo no puede prevalecer sobre lo diverso.